Letras | Cocina
Elaborar una conserva significa, para más de uno, abordar un proceso intimidante en la cocina. Esta conserva de tomates cherry demuestra todo lo contrario.
La primavera ya está trabajando, arduamente y desde hace un tiempo, a pesar de un clima frío que no ha querido abandonarnos. Pero ella trabaja igual. Comienzan a aparecer, de a poco, sus frutos en los mercados. Espárragos y arvejas, alcauciles, algunas frutillas. La abundancia la traerá el verano, y mejor que nos encuentre listos para conservar bien toda esa fruta y verdura maravillosa que, unos meses más adelante, ahuyentada por los primeros fríos, acudirá rápidamente a instalarse en el otro hemisferio.
Tomates! Tomates! Tomates! Una insignia del calor tropical que tanto adoro y disfruto. Los cherry son mis preferidos. Jugosos, crocantes, hermosos! Revientan sin pudor en la boca, llenando cada espacio vacío con su cuota fresca, dulce y ácida, que siempre sorprende.
Los más pequeños son los más dulces, búsquelos, elija en esa caja hasta encontrarlos. Si no lo dejan elegir, acérquese a otro mercado. No se pierda el privilegio de uno de estos tomates chiquitos que pueden comerse como cerezas, o arándanos, como postre, aperitivo, o en ensalada, o de a uno mientras vuelve a casa, para entretener el camino de vuelta.
Para esta conserva de tomates cherry usaremos el horno y… nada más. Los dejamos allí tranquilos, hasta que se arrugue la superficie. Cocinamos del otro lado y en poco más de una hora, los retiramos y dejamos enfriar. Envasamos en aceite de oliva, hierbas a gusto y pimienta.
Para acompañar todo tipo de quesos, como parte de una ensalada, para pastas y también carnes, gazpachos, tartas y cocteles, o nada más como golosina!
Tomates cherry en conserva de oliva, hierbas y pimienta
Ingredientes: (para 2 frascos medianos)
800 grs de tomates cherry
hojas de romero, albahaca c/n
1 cdta. de granos de pimienta machacados
sal marina c/n a gusto
aceite de oliva c/n
aceite vegetal c/n
Preparación:
Precalentar el horno a temperatura baja-suave. Untar una asadera con rocío vegetal y llevar a heladera o freezer hasta el momento de utilizar. Lavar los tomates cherry, secarlos y disponerlos sobre la asadera. Condimentar con sal marina y un chorrito de aceite de oliva. Masajearlos con las manos para que todos los tomates estén cubiertos de aceite.
Llevar a horno a temperatura suave durante aproximadamente 1 ½ hora, dándolos vuelta de tanto en tanto para que se cocinen parejo. Cuando estén arrugaditos y la carne se note tierna pero aún mantenga su estructura, retirar del horno y dejar enfriar.
Colocar un fondo de hierbas en los frascos y apisonarlos un poco para que suelten su aroma.
Cubrir con aceite de oliva hasta más o menos 1 ó 2 cms de la altura del frasco.
Acomodar los tomates cherry, intercalándolos con las hierbas y los granos de pimienta machacados.
Llenar los frascos con aceite vegetal si lo vamos a conservar en la heladera. Si lo conserva en un lugar fresco fuera de la heladera puede utilizar aceite de oliva. Esto resaltará el sabor de los tomates. Pero recuerde, el aceite de oliva solidifica a bajas temperaturas. Puede optar por esta opción, más rica y saludable, y retirar los tomates de la heladera unos minutos antes de servir.
Marisa Bergamasco
(Aficionada a la escritura, al buen cocinar y al buen comer y a los buenos y grandes cariños, de profesión agente de viajes, soñadora de vocación, por siempre…)